Una kk de vaca.
Algo salió mal, y la masa resultó demasiado líquida, hundiéndose las frambuesas al fondo y estando la masa algo gomosilla.
Rendirse no es algo que se encuentre en mi vocabulario, así que volví a buscar recetas, y esta vez encontré otra que prometía más. Si la queréis intentar, este es el enlace. Como no me gusta el chocolate blanco -puaj-, lo sustituí por chocolate con leche. Además mis moldes son más grandes, así que tuve que hornear unos 10 minutillos más para compensar -el truco de pinchar con un palillo hasta que sale limpio-. Como último detalle, si no tenéis harina de almendras -o decidís no comprarla al ver el precio en el súper como le pasó a servidora- se puede sustituir por harina de repostería.
Este fue el resultado.
De aspecto infinitamente mejor.
Probemos a darles un bocado.
Ñam ñam. Está buenísima.
Recomiendo calentarlas unos 15 o 20 segundos en el microondas si no las coméis recién hechas, para que la chocolatina se derrita un poco. Sin calentar están ricas también.