domingo, 28 de febrero de 2010

La primavera puñetera ha decidido que se espera

Tras el día de calorcito ha vuelto a hacer frío, y se ha puesto también a llover mogollón. No solo eso, sino que nos hemos comido esta mañana un tsunami. Bueno, en realidad yo como vivo en la prefectura de Saitama, que no toca con el mar, ni me he enterado, pero lo he visto en las noticias.
Aunque se lo ha comido la costa este, no ha causado mayores daños, así que si conocéis a alguien que viva por la zona, no os preocupéis. Todavía seguimos en alerta, pero con suerte el estar acostumbrados a los desastres naturales servirá para algo.

Para cambiar de tema a algo bonito, os dejo con una foto de cuando visité Juujou hace poco. Me pilla cerca de casa y tiene algunos restaurantes bastante majetes.

viernes, 26 de febrero de 2010

Arte en Aoyama

Volví a ir esta semana a cortarme el pelo, que ya tocaba, pero esta vez tomé un camino distinto para ir a la peluquería. Se puede ir desde la estación de Omotesando, se puede ir en plan masoquista desde la estación de Harajuku, como hice yo la primera vez pensando que no estaba tan lejos, o se puede ir desde la estación de Shibuya. Como ese día tenía curro en Shibuya, aproveché tras el curro.
Por ese camino ví que en Aoyama también tienen esculturas de estas que son demasiado modernas para que los humanos normales como yo las entendamos.


Además, independientemente de que la navidad se pasara hace tiempo o no, todavía hay lucecitas.

El cartel de McDonalds le quita el romanticismo, pero...

jueves, 25 de febrero de 2010

Birras por todas partes

Mira que a mi no me gusta la cerveza en absoluto, pero ya van un par de entradas sobre cerveza y esta va a ser una más. Esto se debe a que al principio de esta semana encontré por Ikebukuro un supermercado de productos de importación, y aparte de encontrar una estantería llena de zumos Don Simón de sabores varios, me encontré con una cosa más que para los españoles y españolas con afición a la cerveza se puede convertir en otro motivo para hacer una visitilla al archipiélago nipón.
Esta vez es...

*redoble de tambores*

Mahou negra, toma ya.

Tengo que volver, que es el único sitio que he encontrado en Tokyo donde venden Twix -y eso que me he pateado la mitad de las tiendas de importación de Tokyo y parte de Saitama y Chiba buscándolo-. También había Nesquik, pero yo soy de Colacao de toda la vida.

miércoles, 24 de febrero de 2010

Ya se empieza a acercar la primavera

¡Por fín! Estos días estoy durmiendo sin necesidad de encender la manta eléctrica :D. Espero que dure y empiece a llegar la primavera de verdad, que si no las flores que han empezado a brotar se van a ir al carajito.
¿Flores? ¡Sí, ya están floreciendo algunos árboles por estos lares! No son cerezos, esos florecen más tarde. Estos... existe la posibilidad de que sean ciruelos, pero no estoy muy segura. Si hay algún experto o experta en plantas que me las pueda identificar lo agradeceré. Si no, me esperaré a que den fruto.


También se agradece el aumento de horas de luz, dicho sea de paso.

domingo, 21 de febrero de 2010

Ardija y la famijia

Oomiya es una de las ciudades más grandes de Saitama, así que hoy estuvimos Kazuki y yo explorando por allí. Para mi sorpresa, descubrí que la ciudad tiene un equipo de fútbol profesional... pero, aunque pensaba que me había acostumbrado a los errores garrafales tanto de inglés como de español, no estaba preparada para esto...


El equipo se llama "Oomiya Ardija", y la mascota es una ardilla... yo se que poner nombres en idiomas extranjeros siempre queda cool y esas cosas, pero... eso no es un nombre, es un chiste.
Probablemente la conversación para decidir el nombre fue así:

"¿Cómo es ardilla en español?"
"Oí en el programa de aprender español de la NHK que es ardilla o algo así"
"¿Ardilla se escribe con y o con j?"
"Pues... con j, ¿no?"

Y ahí se quedó, gracias a alguien a quien no se le ocurrió investigar sobre cómo se pronuncia la letra j en español.

viernes, 19 de febrero de 2010

Visitando paises a través de su gastronomía

Hoy me he ido a comer después de clase con algunos compañeros del trimestre pasado y del actual -en mi escuela cambias de clase cada 3 meses-, y tras muchas vueltas para decidir dónde comer, al final nos encontramos con dos opciones: restaurante de nabe o restaurante vietnamita.
Como la comida de Vietnam tenía buena pinta, decidimos al final entrar allí.

Lo que acabamos pidiendo la mayoría fue esto:


No se cómo se llamará en vietnamita, pero según la explicación japonesa era sopa con pollo y fideos de arroz. El caso es que estaba buena XD.
También es costumbre en los restaurantes japoneses -no, McDonalds no cuenta como restaurante, me da igual de quién sea el Scartegories- que te sirvan té gratis las veces que hagan falta mientras comes. No identificamos al principio el sabor, pero al final el menú resolvió el misterio: té de loto frío. A ver si lo encuentro en el super algún día.
Desde que estoy aquí estoy probando muchos tipos de comida que no había probado antes. Me encanta la comida, así que genial :)

miércoles, 17 de febrero de 2010

Black Decadance

Tokyo Decadance se había cogido un descansito, porque querían renovar la fiesta y traerla con más fuerza. En un principio el descanso iba a ser de tres meses -o eso ponía en el mixi-, pero al final ha sido mucho más corta y hubo edición del Tokyo Decadance el fin de semana pasado.
Esta edición se ha hecho llamar Black Decadance, y es cierto que el concepto ha sido distinto. En vez de ser una fiesta con bailoteo y performances raros, como digo yo, han hecho un festival tradicional japonés mezclado con una fiesta de club.
En primer lugar, el sitio elegido esta vez era un izakaya de Shibuya que parece un pueblo antiguo japonés por dentro. Tengo que ir un día de diario, que tiene que ser una pasada comer ahí -se llama Kyomati koishigure, por si alguien siente curiosidad-.

Pues bien, por la noche Kazuki y yo nos pusimos bien monos y tiramos para allá. Yo me debí de poner especialmente mona, porque la gente de la fiesta no dejaba de pedirme fotos y de hacerse fotos conmigo. Para alguien que no esté familiarizado con el mundillo de las fiestas underground japonesas, yo no soy ni de coña la persona más llamativa que te puedes encontrar.
Tras la introducción, tocan fotos -desgraciadamente la mayoría salieron mal-. Esto es la entrada:

¿Mola o no mola?

Además de pagar la entrada, como en algunos festivales japoneses podías comprar tickets para canjear por bebidas, comida o alguna de las atracciones que organizaban.

Prometo que no usé todos mis tickets en cubatas.

El lugar estaba dividido en 6 chomes -un chome es una de las divisiones en las que se parte un barrio-, y en cada chome había atracciones distintas. A continuación el mapa:


Por no tener que ponerme a explicar lo que hay en cada chome por separado, así en resumen había un puesto de cubatas normales y otro de nihonshu -lo que en España se conoce como sake-, un par de puestos de ropa oscurilla y de complementos sadomasoquistas, unas habitaciones privadas -las VIP rooms, con cena y espectáculo privado-, un pequeño host club -lo juro, con hosts de los de verdad XD-, un par de hostess club con mistress sado y masoquistas, un espectáculo de bondage suspendido en el aire por un profesional frances que hace nudos marineros que no se aflojan ni de coña, etc.

Servidora enfrente del baño de señoras.

La puerta del baño de señoras.

Antes de que Kazuki partiera hacia el baño de caballeros.

El icchome.

La sala VIP.

El francés que ata mujeres y las deja colgando del techo como una longaniza.

Si pedías nihonshu te lo servían en un cubo de madera haciendo de vaso, al estilo antiguo. Se me ocurrió pedirlo sin saber que eso es algo que ya había bebido y que me suele dar arcadas. Aún así fue una experiencia.

¡Baile!

Como dato curioso había un señor de aspecto cuarentón que se paseaba desnudo por la fiesta con un Anpanman pintado en la espalda y debajo el texto "baka gaijin" -en castellano, "guiri gilipollas"-. De todo tiene que haber...

martes, 16 de febrero de 2010

Odiando al invierno y a la madre que lo parió

Una de las cosas que me han llamado la atención de mi escuela desde el principio es que, a pesar de lo caro que es estudiar en ella, puede llegar a resultar tercermundista en determinados aspectos. Un ejemplo es que hay calefacción en las clases pero eso es todo. No hay en los pasillos ni en el baño -de hecho, alguien a quien aún no me he cruzado cara a cara pero que cuando lo haga se va a comer todos mis libros de través, tiene la costumbre de abrir siempre la ventana del baño, aunque esté nevando en la calle-.
Eso significa que en las clases se está calentito cuando pones el termostato, pero si sales al pasillo hace unos 3 grados centígrados tirando por lo alto estos días. Lo mismo en el baño, en el que aunque hay tazas de wc que se calientan -otro día tengo que comentar el apasionante mundo de los wc japoneses-, no ayuda demasiado, ya que yo no soy de sentarme en sitios públicos.
Hoy o mañana va a nevar según la predicción del tiempo, así que si un día salen estalactitas en los pasillos haré una foto, que esas cosas siempre quedan curiosas en el blog.

El invierno y yo no nos llevamos demasiado bien, la verdad. Afortunadamente hace poco heredé una manta eléctrica que es la leche, y aunque la pongas al mínimo da bastante calorcito. Desde que la estoy usando duermo genial, aunque luego salir de la cama es difícil, que se está agustito dentro.

lunes, 15 de febrero de 2010

Corazón de otoño

Ya que ayer tocaba post con corazoncito, he recordado una exposición que vi en Shinjuku cuando vino Teresa. Hice fotos pero nunca me acordé de subir ninguna. Pues ya toca, que ahora queda apropiado.


Estos corazones tienen truco, según pulsas un interruptor u otro de los que hay en cada uno, lograrás que se iluminen las luces que hay encima. ¿Qué tienen de especial esas luces?


Que lo que iluminan son estos otros corazones. Cada uno tiene dos bombillas en el interior. Tiene su gracia ir probando interruptores para ver cómo cambia la luz.

Lo que comentaba de las dos bombillas.

domingo, 14 de febrero de 2010

Feliz día de...

...san Valentín, san Ballantines, san Corte Inglés -o san Mitsukoshi por aquí-, o como lo queráis llamar, pero feliz día :)

Me encantan estos cafés pijos en los que te ponen azucarillos monos.

sábado, 13 de febrero de 2010

¿Sabes una cosa?

Mameshiba no solo se dedica a poner caras monas y a decir burradas para quitar el hambre a la gente, también hace más llevaderos los viajes en el tren por las mañanas -y a cualquier otra hora-. ¿Cómo? Pues con música.

viernes, 12 de febrero de 2010

Fuji san

Los días en los que está el cielo despejado se ve el monte Fuji desde la estación de Todakouen.

Es una foto hecha con un móvil, no se le puede pedir más.

Verlo te hace empezar el día con más ganas :)

Desafortunadamente, hoy está lloviendo, así que no se ve el monte Fuji. A pesar de empezar con menos ganas, hoy he sabido los resultados de mi último "part test", y como es aprobado puedo seguir avanzando en el nivel intermedio :). Eso también te sube mucho los ánimos.

jueves, 11 de febrero de 2010

Más adquisiciones

Como comenté ayer, aparte de la suihanki he recibido más cosas. Por ejemplo, un alargador de enchufe, algunas cosas para la cocina... pero lo mejor es lo que voy a enseñar ahora.

*redoble de tambores*

¿Es un pájaro? ¿Es un avión? Es una PS2 :D

Esto parece la segunda parte de la navidad/cumpleaños/fiesta x en la que te regalan cosas XD.

¡Funciona!

Ahora mismo solo tengo un juego de fútbol, así que me pasaré un día por Akihabara a ver qué puedo encontrar.

P.D: Gonzalo, si aún tienes juegos de PS2 ya sabes, nos echamos unas partidas cuando vengas.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Nuevas adquisiciones

Un amigo de Kazuki se ha ido de Japón, así que como aquí te cobran por tirar a la basura cosas pesadas, me ha cedido unas cuantas cosas. Una de ellas es una máquina para cocinar arroz -en japonés, suihanki-. Aquí como se come mucho arroz son muy populares, y todo el mundo -menos yo hasta hace poco- tiene una en casa.
Ayer me puse a intentar usarla por primera vez, así sin instrucciones ni nada, y me apañé a hacer arroz con ella y todo.
Para quien sienta curiosidad por saber cómo se usa una, os dejo mi pequeña guía de instrucciones.


Lo primero y más importante es lo que tengo en la mano. ¿Eh? ¿Que no se ve bien?


Arroz, efectivamente.
Se que es evidente, pero el siguiente paso es echar arroz y agua suficiente en la máquina. El vasito y el interior de la máquina tienen marcas con números para que hasta un mono sepa cuánta agua y arroz echar.


Ya solo queda cerrarla, pulsar el botón rojo, y esperar 40 minutos -ya, es lenta, pero también puedes dejarlo hacerse por la noche y comértelo aún calentito por la mañana-.


Esta foto la hice con la máquina apagada, pero vamos, que se enciende una luz roja a la derecha, y cuando se encienda la luz naranja de la izquierda ya está el arroz cocidito y listo para comer.

martes, 9 de febrero de 2010

Estrella Galicia

Para los aficionados a beber Estrella Galicia, no os preocupéis, que en Akihabara hay un bar donde se puede pedir.
Un poco cara, eso sí, que la importación es lo que tiene.

lunes, 8 de febrero de 2010

La dieta del onigiri

Kazuki y yo hemos decidido probar la dieta del onigiri, y a base de comer onigiris nada más mirad lo majísimos y delgadísimos que nos hemos quedado.

Tras la primera semana.

Tras 3 semanas de dieta Kazuki se quedó hasta más pequeñito y todo.

Advertencia: no intente la dieta del onigiri sin la supervisión de una persona adulta y/o responsable.

domingo, 7 de febrero de 2010

La Perla

Yo llegué un poco tarde a Lost, así que este verano me comí las 5 temporadas del tirón. Ahora que por fín han estrenado la sexta temporada, he recordado que hay algo que veo todos los días enfrente de la estación de tren que me recuerda mucho a Lost, y por fín le he hecho una foto.

Para los seguidores de la serie, ¿habéis visto ya a qué me refiero? ¿No?

¿Y ahora?

Nos están vigilando...

sábado, 6 de febrero de 2010

En invierno hace un frío del copón

Pero frío frío frío, de este con mayúsculas. Eso unido a viento, de ese que hace que te arrepientas de haber puesto la lavadora antes de abrir la ventana a ver si hacía clima para ello. Por eso, y porque me acabo de dar cuenta de que aún hay alguna foto del otoño que me dejé por subir, hoy toca volver a cuando hacía mejor clima, a ver si así entro en calor.


En el cementerio budista de al lado de mi casa la mayor parte de los árboles son de hoja perenne, pero los de hoja caduca se ponen así de rojos y de bonitos. Si hasta al buda grandote se le saltan los colores un poco viéndolo.

viernes, 5 de febrero de 2010

Shabu shabu

Hoy me fui con mis compañeros de clase a comer shabu shabu. Nunca lo había comido, así que tenía bastantes ganas de que llegara hoy para probarlo.
Lo bueno del restaurante al que fuimos es que a medio día bajan mucho el precio, y teníamos tabehoudai -buffet libre en japonés- y nomihoudai -la versión sin alcohol de una barra libre-. En resúmen, que ibamos a ponernos hasta el culo.

Aunque ya he dejado un link a la wikipedia, explico un poco. Lo del centro es una olla de agua hirviendo -ahí aún no estaba hirviendo-. Ahí íbamos echando la carne que nos iban trayendo, las verduras que nos íbamos trayendo nosotros, el tofu, etc. En los platitos pequeños nos echábamos salsa para ir mojando la comida, y aunque no sale en la foto, nos iban trayendo arroz también para acompañar.

Me ha gustado más este que el restaurante de comida de Okinawa al que fuimos la otra vez XD.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Mochitsuki

Ayer estábamos en clase cuando la profesora anunció que iban a hacer mochi en la escuela. El mochi es un pastel de arroz tradicional de por aquí, bastante blandorrillo y que se estira mucho, como el queso fundido pero en plan bestia. Pues bien, al acabar las clases me pasé por allí.

¡Dale fuerte al arroz, no sea que se levante y nos ataque a todos!


Básicamente, esa señora movía la masa tras mojarse las manos y entonces, a tiempo de quitarlas de ahí, alguien arreaba una leche a la masa con ese martillo tan grande. Y así sucesivamente.

Cuando empezó el tema también estaban asando patatas dulces, pero llegué tarde... así que me tuve que conformar con comer mochi nada más. Son variedades de mochi que no había probado, así que fue una experiencia interesante.

Lo de la izquierda es dulce, lo de la derecha, salado.

El mochi nunca me ha llamado especialmente la atención, pero es la primera vez que lo como recién hecho. Así calentito gana bastante, aunque acabé con el estómago como si me hubieran hecho una bola de mochi dentro también, lo que llena.

¡La próxima vez conseguiré pillar también patatas dulces asadas a tiempo!

martes, 2 de febrero de 2010

Blanco como la nieve y el mochi

Ayer cayó la primera nevada del año. A mi personalmente no me gusta la nieve, y menos cuando se ponen a caer unos copos enormes de camino al curro. Aún así le hice fotos a la vuelta, que esto no se ve todos los días.
Comencemos por la nevada en Akabane.

Cuando nieva en diagonal, malo.

Afortunadamente Akabane está a dos estaciones de la mía, pero al llegar se veía que no iba a parar en bastante rato.

Empezando a cuajar en Toda.

Mis vecinos se lo habrán pasado pipa rascando nieve por la mañana.

La vista desde mi ventana. Mi cuerda de tender la ropa os saluda.

Tras poner la calefacción a tope, hacerme un ramen calentito para cenar y ponerme mi pijama -que abriga que no veas-, me fui a dormir bien calentita, sin pensar en la nieve de afuera.
Y amaneció.



Como tanta rasca no es buena para la salud, he decidido que me voy a tomar un té calentito, a ver si así se me recupera la garganta también, que la tengo fastidiadilla.

Amor eterno al té calentito.