lunes, 2 de abril de 2018

Vuelve el ramen que te hace molar

El otro día me dio antojo de ramen, así que estuvimos Kazuki y yo investigando ranking de restaurantes por Tokio y Saitama a ver a dónde podíamos ir.
A mitad de búsqueda Kazuki se acordó de uno de sus restaurante de ramen favoritos llamado Bario, del que hablé en este blog hace no mucho, unos 6 años de nada.
Nos apetecía algo así rico e hipercalórico, y ese sitio reune todas las características, así que por variar un poco en vez de ir al de Shinbashi fuimos a la sucursal de Nihonbashi.
Este es el look del día, por cierto. Kazuki hace las fotos a traición.

Ni idea de qué estaba mirando. La belleza del cielo azul, supongo.

Tras buscar un poco -está algo escondidillo- lo encontramos.


Este ramen, además de hacer que te salga pelo en el pecho según la cantidad de ajo que te eches en la sopa -leed esta entrada para entender la coña-, tiene como característica la gran cantidad de fideos que te sirven, unos 300 gramos. Como referencia, lo normal en este tipo de restaurantes suelen ser 150 gramos.
Decidimos que ya que estábamos, no solo íbamos a pedir la ración normal -hay una ración light con "solo" 200 gramos de fideos-, sino que también pediríamos extra de carne de cerdo. Aquí o foll... Un momento, ¿hay niños leyendo esto?

Compramos nuestras fichas en la máquina de fuera, entramos, las pusimos en el mostrador, y esperamos a que nos sirvieran nuestro ramen.
Va tan hasta el borde de sopa que se me derramó un poco al coger el cuenco, como se puede ver en la foto. Menos mal que lleva ese platito debajo.

A hipercalorizarse.

Está rico, pero si queréis disfrutar aún más de la comida, tienen un cartelito en la barra explicando cómo.


Traduciendo así por encima:

Cómo comer en Bario.
1. Comerse 1/3 así tal cual.
2. Echar ajo. Primero 1 cucharada, empecemos siendo "ikemen" (ikemen significa "hombre atractivo" en japonés. Recordemos que este ramen te da testosterona).
3. Echar nuestro picante especial. Con una cucharada vale.
4. Cuando se haya acabado los fideos, echar vinagre en la sopa y bebérsela junto con la verdura que haya sobrado.

Seguí los pasos, y he de admitir que no llegué a comérmelo todo -tras 250 gramos de fideos, bastante sopa de cerdo con grasilla, toda la carne de cerdo y mogollón de brotes de soja y repollo empacha-, así que eché el vinagre antes de acabarme los fideos.

Está bastante bueno, recomendado para un día con mucha hambre.

6 comentarios:

  1. ¡La leche! Eso tiene muy buena pinta... también tiene pinta de acercarte un poco más a la muerte xD

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, creo que mis arterias se taponaron un poquito XD

      Eliminar
  2. ¡Con eso yo como una semana! O dos XD. Lo del pelo en pecho lo tendré en cuenta si algún día me da por cambiarme de sexo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bien, ya no me sentiré mal por no ser capaz de acabármelo todo XD

      Eliminar
  3. Si me ponen un cuarto de eso a lo mejor consigo acabarlo 😱😱

    Pero lo importante es... Había machos? Había ikemens??😂😂😂

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es una ración potente, te tiene que pillar con hambre XD
      Había seres del género masculino, pero ikemens va a ser que no XD

      Eliminar

Indica SIEMPRE tu nombre/alias cuando comentes sin cuenta de Google. Gracias.