Tras un largo viaje, teta-toallas, onsen para pies, ramen de kimchi con queso y un buen sueño nos dispusimos a recorrer Osaka. Desgraciadamente de camino a Shin Osaka la cremallera de mi bolso se rompió. Como soy una persona muy apañada compré un pack de costura en un convini, la volví a coser, y aquí no ha pasado nada.
Por si alguien pensaba que lo decía de coña.
Kazuki es mi recompensa por un trabajo bien hecho.
Tras esto fuimos a Doutombori. En Tokyo se refieren a este barrio como "el Takeshita doori de Osaka". No me lo pareció demasiado, pero desde luego que estaba animado y lleno de gente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Indica SIEMPRE tu nombre/alias cuando comentes sin cuenta de Google. Gracias.