Lo gracioso de esto es que en Japón la mayor parte de la población es atea o "religiosa" pero no practicante en absoluto. Es casi más por tradición que por creencia que esto aún se haga.
Por estas fechas suele haber vacaciones en muchas empresas, pero adivinad quién tiene que ir a clase igualmente...
Pues bien, esto también implica un evento llamado Bon odori. Se pone un escenario en el centro, y la gente baila alrededor bailes típicos de cada zona. Con este baile se da la bienvenida a los espíritus que vienen de visita.
En la escuela de primaria de al lado de mi casa dejaron el tinglado montado durante cerca de una semana, y al final la semana pasada, volviendo a casa, me lo encontré de verdad. Esto explica por qué se oía un misterioso tambor cada noche durante meses cuando volvía a casa tarde de noche.
No hice fotos durante el evento, pues mi móvil saca unas fotos horribles de noche, pero estas son de cuando aún era de día.



Me parece curioso que aun siendo ateos se siga haciendo por costumbre, es muy tipico Japones ¿no?
ResponderEliminarSí, lo de mantener las tradiciones antiguas por costumbre parece muy típico de estos lares.
ResponderEliminarHay más cosas así, como la limpieza de año nuevo, que tiene origen religioso también pero lo hace todo el mundo.